Unidad 4: FISIOTERAPIA Y ENFERMERÍA

Los fisioterapeutas emplean el ejercicio físico para mejorar la salud de las personas, pero su trabajo es mucho más amplio que el trabajo del masajista. Enseñan ejercicios para poner en movimiento de nuevo articulaciones dañadas o reducir el dolor. Enseñan a la gente a caminar usando un bastón o muletas. Manipulan las articulaciones o dan masajes. Utilizan máquinas de ultrasonido para el tratamiento de lesiones. Ayudan a los pacientes a respirar mejor. Normalmente colaboran con otros profesionales de la salud. Los pacientes presentan una amplia gama de problemas, como artritis, dolor de espalda, de cuello o de rodilla, o lesiones como fracturas. En un día típico el fisioterapeuta puede tratar pacientes desde niños hasta ancianos. La fisioterapia es un trabajo físico, y las cualidades personales necesarias son la tolerancia y la paciencia, así como buenas habilidades de comunicación.

Muy pocas profesiones ofrecen hoy una gama tan amplia de especialidades y carreras profesionales como la enfermería, pero es una profesión que implica un trabajo duro y exige un gran compromiso. Los enfermeros deben centrarse en los pacientes como personas, no sólo en la enfermedad que él o ella puede estar padeciendo, sino también en las necesidades e inquietudes generadas por la enfermedad, incluyendo la presión sobre la familia y los amigos. Independientemente de tu especialización - cuidados intensivos, reanimación y recuperación, tratamiento del cáncer o el cuidado de las personas de edad avanzada - lo que hace de la enfermería un reto es la diversidad de situaciones a las que tendrás que hacer frente. Los pacientes con los que trabajarás pueden ser jóvenes o ancianos, con lesiones graves o enfermedades crónicas. El equipo del que formarás parte incluye médicos, fisioterapeutas, anestesistas, farmacéuticos, dietistas y otros. Se trata de un trabajo exigente con graves responsabilidades. A cambio, tienes la satisfacción de saber que contribuyes a reducir el sufrimiento y a mejorar la salud de las personas a tu cuidado.

Decidir desarrollarse profesionalmente en algún país extranjero se ha convertido en los últimos años, y sobre todo a raíz de la incorporación a la Unión Europea, en una alternativa de cualificación accesible y prometedora, que en muchos casos supone un valor añadido en el currículum vitae de cualquier profesional. En este sentido, cabe destacar la profesión de enfermería como una ocupación con enormes posibilidades laborales en el extranjero, conformándose como una opción cada vez más viable para aquellos que finalizan sus estudios de enfermería y no tienen experiencia laboral. Dicha experiencia no es requisito imprescindible para trabajar fuera de España, lo cual ofrece una excelente oportunidad a los cerca de 40.000 enfermeros y enfermeras españoles sin empleo estable.